Esta mañana hemos tenido una nueva salida del CCC. Hoy éramos tres
valientes: Manuel Paricio, Josep Comas y un servidor, José Manuel
Santín. Desafiando las adversas condiciones meteorológicas del fin de
semana y contra toda esperanza, nos hemos plantado en Condal para hacer
un poco de deporte. Dado que el día no era de fiar y haciendo gala de un
auténtico espíritu democrático, hemos decidido asegurar y hacer la ruta
que va a la playa del Prat, ya conocida por los miembros del CCC.
Desde el primer momento el ritmo de pedaleo ha quedado completamente
supeditado a la contemplación del paisaje y los encantos del delta del
Llobregat. Entre mariposas y caracoles que sacaban sus cuernos al sol,
nos hemos dejado llevar por los senderos que siguen el curso de nuestro
querido río. Sin embargo, en un punto del recorrido hemos tenido que
tirar de pericia y, por qué no decirlo, de veteranía para atravesar una
zona inundada sin mojarnos. Por supuesto lo hemos conseguido.
El camino nos ha llevado hasta la playa donde hemos pasado unos
minutos contemplando el mar, hoy enfurecido. Allí nos hemos hecho la
foto que inmortalizará esta salida para siempre.
Ya de vuelta,
nos hemos visto sorprendidos por un incendio que parecía tener bien
entretenidos a los bomberos del aeropuerto. Por suerte, hemos podido
escapar de las llamas, y continuar nuestro recorrido guiados en último
término por los amplios conocimientos del terreno atesorados por Manuel.
Finalmente, nuestro estimado patrocinador no ha faltado a la cita y, en
algún lugar de Cornellá, hemos repasado la actualidad política y/o
criminal, mientras recuperábamos fuerzas a base de un completo complejo
vitamínico: olivas, patatas fritas y cerveza.
Y esto es todo amigos. La próxima salida el mes que viene.